martes, octubre 03, 2006

poema para un calendario

O c t u b r e
Se está poniendo el sol y ya es otoño,
el verano suena a olvido,
La niebla ha pasado las hojas
y es su vejez dorada quien puebla
las ramas de los chopos dormidos.

Amor… ¡que dulce declinar tu corazón
y el mío sin que nada los haya separado!
Que suave amortecer,
que silencio, junto a los leños y sin frío.

Vamos a caminar con el otoño
cogidos de la mano
porque ya hemos vivido comienzo y primavera,
porque hemos amado, entre dos,
la vida entera, porque nos llegue el fin
abrazados todavía
como aquella noche primera…

No quiero sobrevivirte amor;
quiero que se marchite a tu lado mi sonrisa,
que se duerma sobre la almohada,
quiero que mi color se vuelva atardecido,
quiero morir en ti si distanciar tu voz
significa seguir vivo.

Vamos a sonreír amor porque es otoño,
porque somos un color, camino del invierno
que besa su dulce envejecer
al final del día.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Seis meses después aparece la segunda entrada...!felicidades! Espero que esto sea el arranque definitivo y puede leerte con más periodicidad por estos parajes cyber-electrónicos...
...muy bonitas palabres por cierto.

un abrazo!